14 de febrero | 2014
En la madrugada del viernes pasado, en la provincia argentina de La Pampa, un joven fue agredido por agentes de seguridad de una discoteca porque él le dijo a uno de ellos que era homosexual. Este hecho abre una gran brecha entre los derechos formales adquiridos en los últimos años por la comunidad LGBTI y la práctica cotidiana de los mismos.